Existe una isla rocosa con forma de elefante, y parece ser que fue el resultado de una historia de amor y amistad entre un elefante y un pez que convivieron durante un tiempo, y realizaron un profundo camino de autoconocimiento, aceptación de las diferencias y actos de profunda nobleza. Finalmente, la unión de todos los elementos de la vida y la naturaleza confluyen para mostrarnos cuán mágica y agradecida es la existencia de todos los seres que habitamos este planeta.